Los neumáticos constituyen el elemento básico de la suspensión y de su flexibidad depende parte del confort y el equilibrio del automóvil.El neumático es el único componente del automóvil que nos une a la calzada y por eso su importancia.
Tan es así que un reventón , un pinchazo , un desgaste anormal o unos gramos que falten en una sola rueda pueden producir un accidente con sus terribles consecuencias. Pero gracias a las complejísimas tecnologías de fabricación , el reventón se hace excepcional y en la mayoría de los casos obedece a una negligencia por parte del conductor. De hecho el perfecto mantenimiento del neumático exige sólo dos minutos cada semana.
El neumático tiene "memoria" que almacena en su armadura todos los malos tratos a que le sometemos: rozamientos, golpes, aplastamientos en aristas, piedras constantes y naturalmente deformaciones producidas por inflados generalmente inferiores a lo aconsejable, se suman en las gomas y armazones.
Como si fuese poco, el estado de conservación depende también de la carga habitual, paralelismo de las ruedas delanteras, correcta caída, equilibrado de cada rueda, nerviosismo de los arranques y brutalidad de los frenados. La primera conclusión es que su seguridad elemental consiste en mantener perfectamente correcta la presión del aire en sus neumáticos. Nunca intentar rodar con una presión inferior a la recomendada por el fabricante en calzadas mojadas o nevadas por la razón que el máximo agarre posible se define con dicho valor de inflado. Este a elegido la rueda de su vehículo con relación a la masa tipo de propulsión, velocidad, etc. El radial se ha impuesto por sus obvias cualidades de confort, duración, agarre y seguridad por eso no es conveniente colocar dos radiales distintos y menos de dos marcas diferentes. Caso de cambiar de neumáticos, serán de las mismas características que los dos conservados en uso, en dicha operación se deberían cambiar los nuevos en el tren trasero del vehículo, sin embargo este tipo de operación no puede realizarse si los neumáticos que van a quedarse en el eje delantero acusan un desgaste superior al 50 por 100 o no tienen una profundidad restante de dibujo sensiblemente igual. Si se diese esta última circunstancia, colocar cuatro neumáticos nuevos y conservar los desgastados para auxilio.
-Se efectúa el control del inflado en FRÍO
-Se cruzan las ruedas cada 8/10000 km
-Todo neumático comienza a constituir un peligro cuando la profundidad de sus dibujos no rebasa 2mm, en el supuesto caso de un desgaste uniforme. seguiré (fuente enciclopedia práctica del automovil Nueva Lente)
El neumático tiene "memoria" que almacena en su armadura todos los malos tratos a que le sometemos: rozamientos, golpes, aplastamientos en aristas, piedras constantes y naturalmente deformaciones producidas por inflados generalmente inferiores a lo aconsejable, se suman en las gomas y armazones.
Como si fuese poco, el estado de conservación depende también de la carga habitual, paralelismo de las ruedas delanteras, correcta caída, equilibrado de cada rueda, nerviosismo de los arranques y brutalidad de los frenados. La primera conclusión es que su seguridad elemental consiste en mantener perfectamente correcta la presión del aire en sus neumáticos. Nunca intentar rodar con una presión inferior a la recomendada por el fabricante en calzadas mojadas o nevadas por la razón que el máximo agarre posible se define con dicho valor de inflado. Este a elegido la rueda de su vehículo con relación a la masa tipo de propulsión, velocidad, etc. El radial se ha impuesto por sus obvias cualidades de confort, duración, agarre y seguridad por eso no es conveniente colocar dos radiales distintos y menos de dos marcas diferentes. Caso de cambiar de neumáticos, serán de las mismas características que los dos conservados en uso, en dicha operación se deberían cambiar los nuevos en el tren trasero del vehículo, sin embargo este tipo de operación no puede realizarse si los neumáticos que van a quedarse en el eje delantero acusan un desgaste superior al 50 por 100 o no tienen una profundidad restante de dibujo sensiblemente igual. Si se diese esta última circunstancia, colocar cuatro neumáticos nuevos y conservar los desgastados para auxilio.
-Se efectúa el control del inflado en FRÍO
-Se cruzan las ruedas cada 8/10000 km
-Todo neumático comienza a constituir un peligro cuando la profundidad de sus dibujos no rebasa 2mm, en el supuesto caso de un desgaste uniforme. seguiré (fuente enciclopedia práctica del automovil Nueva Lente)
